Cuentos para leer I-B. Un señor vendía bocadillos en un pequeño establecimiento al lado de la carretera. Siempre estaba lleno de clientes porque los bocadillos, aunque no eran baratos, eran espectaculares. El propietario era muy amable, siempre parecía contento e ilusionado. El negocio funcionaba muy bien. Su hijo, que estaba haciendo un Máster en Administración de Negocios en una universidad muy prestigiosa, un día, hablando por teléfono, le preguntó: —Padre, ¿qué tal te va con la crisis? El padre contestó: —Hijo, ¿qué crisis? Si aquí va todo estupendamente… La pregunta de su hijo le desconcertó: —¿Pero no te has enterado? Hay una crisis tremenda. Tienes que tomar urgentemente medidas. Ante esta carta, el negociante empezó a preocuparse y hacer cábalas: —Quizás estoy comprando jamón y queso demasiado buenos. Así que empezó a comprar, primero, productos más económicos. Luego, empezó a comprar en menor cantidad. También cambió de actitud, estaba más tenso…Y, poco a poco, cada v