CUENTOS NARRADOS - 4
Con esta fábula podemos rescatar valores esenciales como: El valor de la prudencia, la humildad, el valor del ingenio y el por qué es tan negativa la codicia.
La ansiedad que nos produce desear algo aunque no lo necesitemos, lo único que hace es esclavizarnos. Y por supuesto, nunca suele traernos buenas consecuencias.La ansiedad nos ciega y anula nuestra razón. Cuando sientas ansiedad por algo, solo respira profundamente y piensa: la ansiedad es como un torbellino que no nos deja pensar.
Lo mejor si estás dentro de ese torbellino es detenerte y esperar a que pase de largo. Y entonces, pensar. Si nos diéramos algo más de tiempo, veríamos que el deseo cambia. Tal vez ya no sea tan fuerte, y veamos los pros y los contras. Es el momento en el que la razón vuelve y el sentido de la prudencia también.